Seguidores y subscriptores


HISTORIA DE LA EDUCACIÓN

Seminario optativo de la Maestría en Educación Universitaria

24 abril, 2011

HISTORIA DE LAS IDEAS PEDAGÓGICAS : Moacir Gadotti


GADOTTI, Moacir (1998): Historia de las ideas pedagógicas, México: Siglo XXI. Recuperado 23.4.2011 de: http://books.google.com/books?id=5xRyyoX_FUoC&lpg=PR17&dq=moacir%20gadotti%20historia%20de%20las%20ideas%20pedagogicas&hl=es&pg=PP1#v=onepage&q&f=false   (Vista parcial)
Comentado por Prof. Juan Carlos Paradiso

Moacir Gadotti es Master en Filosofía de la Educación, doctorado en Ciencias de la Educación, desempeñándose académicamente en San Paulo, en universidades pontificias del Brasil y en la Universidad de Campinas. Fue Jefe de gabinete de la Secretaría Municipal de Educação de la Prefeitura de São Paulo, en la gestión de Paulo Freire. Es reconocido por su nivel científico tanto como por su militancia social y política.
Conocí este texto de Gadotti en mi época de estudiante de Ciencias de la Educación en la Facultad de Humanidades y Artes de Rosario. Como sucede frecuentemente, en las malas prácticas bibliográficas de las universidades argentinas, mi primer contacto fue a través de algunas fotocopias gastadas y sin demasiadas referencias, mucho menos del autor. Cuando fui profesor de Historia de la Educación en la Facultad de Psicología incluí este texto entre la bibliografía. Más adelante llegó Internet y Google (con él también Google Books) con lo cual pude tener acceso a un conocimiento más contextualizado del autor y más textualizado del libro (si se me permite el juego de palabras). A pesar de que está disponible sólo una visión parcial del libro – como sucede con la mayoría de los que se publican a través de este recurso de la Red – se pueden leer muchos capítulos casi completos, lo cual, sumado a las fotocopias que conservaba cuidadosamente archivadas desde mis épocas de estudiante, me permite efectuar estas consideraciones.
El libro tiene un Prólogo a la edición mexicana, a cargo de José Pescador, y un Prefacio a la edición brasileña, por Antônio Joaquim Severino. Ambos son importantes, como suele suceder con estos paratextos, a los cuales se les presta tan poca atención – pensemos por ejemplo cuando se piden fotocopias cómo se intenta ahorrar omitiendo el prólogo o las introducciones –. En este caso, Pescador hace un análisis de ciertos aspectos textuales que podrían llamar la atención o provocar críticas de sus lectores, mientras que el brasileiro, colega de Moacir, nos brinda datos relevantes sobre su militancia político-social, y su producción intelectual.
Ningún análisis o comentario sobre el libro puede omitir referirse a quién es Moacir Gadotti – la persona, el educador, el político, el autor – y a la vez reconocer quién será el público lector al cual está destinado el libro, claramente pensado para el nivel secundario o para estudiantes de licenciatura. Tiene casi la estructura de un Manual.
Rigurosamente estructurado en sus aspectos formales, el libro consta de dieciséis capítulos ordenados diacrónicamente, a su vez divididos en partes que generalmente representan distintas corrientes más o menos sincrónicas. Cada uno de las partes del capítulo presenta una exposición sucinta del tema, adecuada al nivel de los estudiantes a quienes va dirigida, le siguen fragmentos textuales seleccionados de autores clásicos del período y finalmente unas preguntas para orientar o disparar reflexiones en el lector o en el aula. Es tal la regularidad de su factura que, cuando se ha leído un capítulo se logra comprender la estructura de toda la obra, aunque termina sorprendentemente con una prospectiva. El reiterado esquema facilita, sin duda, la tarea de comparación que puede efectuarse con provecho en el estudio de la materia.
Después de todo, como dice Pescador en el prólogo, se trata de una obra condensada, no enciclopédica ni para eruditos. En el texto hay ‘notorias ausencias’, como reconoce el mismo Pescador. Pero si fuera por mi propio gusto, la obra correría el peligro de convertirse en una enciclopedia. En ese sentido, el autor no le teme a las tijeras – de la misma apariencia de las que aparecen entre los instrumentos de Office / Word de Windows – y las usa sin remordimientos.
Por ello, me hubiera gustado, en lo personal, leer esta obra en una versión académica, dando más lugar al debate, no omitiendo tantos autores significativos, si bien ese texto ya no sería tan accesible para quienes se inician en la materia. Pero, por suerte, quienes nos hemos llegado a apasionar por investigar la Historia de la Educación, tenemos otros textos del mismo Gadotti, en donde profundiza y se explaya a su gusto … a nuestro gusto.
Un autor tiene dos opciones básicas cuando debe presentar los hechos históricos o políticos: lo hace de una manera pretendidamente imparcial u objetiva – empresa difícil, si las hay – o se juega por una idea contra las otras opciones antagónicas. Hay un continuum de posiciones intermedias entre ambos extremos, naturalmente. Aún la pedagogía libertaria sostiene generalmente la opción o el principio contrario al adoctrinamiento. Moacir muestra que, en los hechos principales, toma una posición clara y explícita – lo que define como dialéctica o crítica – y desde esta postura pasa a juzgar y valorar los hechos de la historia de las ideas pedagógicas desde su propio nacimiento, es decir del comienzo de la reflexión sobre educación … es decir de la filosofía de la educación. Esta postura no es rara en los autores latinoamericanos. Quizás es más llamativa cuando se encuentra en un texto diseñado como un manual, donde las conclusiones parecen un poco esquemáticas o rápidas, pues son muchos temas los que deben ser pensados en este viaje imaginario de 5000 años en 354 páginas, que es como la vuelta a (la historia del) mundo en un año … lectivo de 365 días. 
El prólogo de J. Pescador parece lograr ese difícil equilibrio al explicitar algunos de los puntos discutibles del texto, aunque en su defensa sin exaltación, culmina cada cuestionamiento con un: “obstáculo superado en esta obra”, como se espera de un prologuista.
J. Pescador advierte que, si se cae en el rigorismo excesivo, se puede desde el inicio subrayar las ausencias del texto ...
El primer problema que detecta es que el tema no puede tratarse sin referencia al contexto, y que en el libro “Hay una muy seria preocupación por la enseñanza de la historia de la pedagogía, por subrayar lo que es contexto económico, político, religioso de las ideas pedagógicas relevantes ... en tal situación no se puede ser indiferente como en el estudio de los fenómenos naturales.  xiii
La posición materialista dialéctica del autor, el punto de vista desde el cual estudia la historia, tan claramente explicitada desde el principio, es una manera honesta de facilitar que el lector no esté desprevenido en el resto de la obra. Uno podría asombrarse en Argentina, porque esta ideología aunque suele verse en los claustros intelectuales, raramente aparece en el discurso político mediático. Para ello debemos entender que el movimiento popular en Brasil, así como en Uruguay y en Chile, es mayoritariamente socialista, a diferencia de nuestro país en donde prevalece la posición populista con todas sus vertientes, desde el capitalismo popular de mercado al distribucionismo caricativo y no pocas veces clientelístico.
La perspectiva ideológica se muestra desde el primer capítulo. Por otra parte, bien pronto se perfila su afán pedagógico - ya que es un libro destinado a los estudiantes y docentes –. Quizás ciertas simplificaciones o repeticiones  parecen acercarse a un reduccionismo que el autor trata de evitar. Pero veamos el párrafo siguiente, referido al nacimiento de la escuela:

“La escuela que tenemos hoy nació con la jerarquización y la desigualdad económica generada por aquellos que se apoderaron del excedente producido por la comunidad primitiva. Desde entonces la historia de la educación se constituye en una prolongación de la historia de las desigualdades económicas. La educación primitiva era única, igual para todos; con la división social del trabajo aparece también la desigualdad de las educaciones una para los explotadores y otra para los explotados, una para los ricos y otra para los pobres.  (M. Gadotti, 1998: pag 9)

Y entonces nos preguntaremos: ¿Cómo es que este pensador es docente en universidades católicas en el Brasil? La respuesta la da el posicionamiento de la iglesia brasileira frente a los problemas sociales, que ha dado al mundo un Paulo Freire, hoy disputando con Theilard de Chardin o la Madre Teresa el lugar más prominente en el panteón celestial católico del siglo XX.
En el prefacio (A. J. Severino) nos brinda algunas claves para tener una dimensión de la personalidad de Gadotti, exaltando la:
”riqueza de su producción teórica, militante y crítica, trabajando por la transformación de la sociedad brasileña. Esfuerzo de politización de la educación, por su importancia para los destinos de la sociedad, ya sea en la docencia universitaria, la administración de los sistemas públicos de enseñanza, la investigación, o la militancia sindical y política. “El texto gana la perspectiva de un amplio itinerario, indicando caminos, dando pistas, lanzando provocaciones, solicitando profundizaciones!” xviii

Algo que nos parece que está en consonancia con la posición ideológica de Gadotti, es haber incluido en la historia del pensamiento, los aportes de culturas marginadas, olvidadas o exóticas, como son autores orientales, africanos, latinoamericanos, algo que nosotros habíamos logrado desde la cátedra en Rosario hasta mi separación. También tiene un lugar para los nuevos movimientos surgidos durante el posmodernismo. El contenido de los dieciséis capítulos es el siguiente: El pensamiento pedagógico (PP) oriental (incluye solamente el taoísmo y el judaísmo), PP griego (con textos de Sócrates, Platón y Aristóteles), PP romano, PP medieval (San Agustín y Santo Tomás), renacentista, nacimiento del PP moderno, PP ilustrado, PP positivista, PP socialista, PP de la Escuela Nueva, PP fenomenológico-existencialista, PP antiautoritario, PP crítico, PP del 3º mundo, PP brasileño, Perspectivas actuales, (incluyendo lo que el autor llama un ‘intento ecléctico’). Resumidamente: una obra para recomendar a los estudiantes de Ciencias de la Educación (especialmente en asignaturas como Historia de la Educación y Filosofía de la Educación) o estudiantes de Historia, que debería complementarse con otras perspectivas y, sobre todo, para quien tenga interés en profundizar, con otros textos, incluso del mismo autor. 
Publicado como Reseña en Google Books. 
Se aconseja consultar Obras relacionadas (todas) que están publicadas en Google Books

No hay comentarios.: